sábado, 2 de abril de 2016

Punto a dos agujas

De pequeña me encantaba ver a mi abuela haciendo punto. El sonido de las agujas chocando una con la otra, ver crecer la labor, observar como una hebra de lana se convertía en algo: bufanda, jersey o cojín, me hipnotizaba. 
Siempre quería que me enseñase, que me dejara jugar con sus lanas, pero no había forma. No le parecía algo para una niña. Al final mi madre, que también sabe hacer punto aunque no lo haga, se decidió a enseñarme. Y ahí estaba yo, escuchando atentamente como coger las agujas "no son un juguete" decía, "tienes que tener mucho cuidado de no pincharte". Fijándome en cómo debía ir pasando la lana para montar los puntos, demasiado fuerte al principio  con esa obsesión por que no se me escapase ningún punto.

Aprendí lo básico:
  • Montar puntos
  • Tejer del derecho 
  • Tejer del revés
  • Punto elástico 
  • Cerrar puntos
Y tan contenta!! Nunca aprendí al menguar ni a crecer (así lo dice mi abuela, que me perdonen las expertas por mi ignorancia), así que pronto asumí que no iba a hacer mis propios jerséis, pero me lo pasaba en grande tejiendo cuadrados que deshacía al terminar para volver a tener lana con la que tejer.

Pasaron los años y fui abandonando esa afición, pero como todo vuelve he salido al comprar unas agujas para hacer algo más que tejer una y otra vez el mismo ovillo de lana. Y me pongo al buscar una lana adecuada para hacerle algo a mi Chiquitita. Y como soy una inconsciente he decidido hacerle una manta, pero no una mantita pequeña, ¡no! Una para su maxi cuna de 140 × 70. 
He buscado y buscado hasta encontrar una lana suave. No se si podréis apreciarlo en la foto, pero el tacto es super agradable, además con ella no se ve el dibujo, por lo que he pensado que casi mejor no vaya al ser que me coma algún punto. Me cubro las espaldas, je je je! 

Ahora tengo que convertir esto en una manta. Deseadme suerte! Espero poder compartir dentro de poco mis progresos.
Hasta la próxima!  




2 comentarios:

  1. ¡Buenos días, Araceli! A mi abuela también le encanta hacer punto, aunque ella es más de punto de cruz para hacer tapetes y esas cosas... Yo tengo que confesar que no me he parado a aprender, aunque con lo torpón que soy para las manualidades no sé si lo conseguiría!! jejeje

    Un beso y que disfrutes de la semana,
    Le Style et Moi

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola! El punto de cruz también me gusta mucho. Me ayuda al relajarme. Igual algún día me animo a enseñar algo. Todo es ponerse, yo tampoco suelo ser hábil con las manualidades, pero resulta divertido.
      Feliz semana!!

      Eliminar